"Cuando las observo, todas ahí, alrededor de mi mesa, repleta de velas y de copas, tantas emociones libres de juicio, a flor de piel, como diría mi abuela. Siempre en el mismo lugar, el espacio se conserva inmóvil... lo que cambia es la energia de cada una de ellas, abiertas al asombro... entregadas y confiadas, como siempre, como nunca, como la primera vez o la última. Y es alli donde se produce la alquimia: se elaboran y cocinan los duelos a través de nuevas escuchas, nuevos abrazos, otras perspectivas -o las mismas-, y se combinan majestuosamente las ganas de estar bien. Todas ellas, distintas y únicas, perfectamente desconocidas".
Con estas palabras, Majo recibió en su casa a más de 340 mujeres y seis hombres perfectamente desconocidos, formando asi una comunidad que hoy es el eco de una voz que se mantiene viva con el recuerdo de cada una de las noches compartidas En este libro se compilan microrrelatos de la autora, charlas de WhatsApp con su madre y fieles testimonios de la necesidad de una escucha fraterna que nos convoca y habita sigilosamente, esperando el "llamado".
Con una frescura y un peculiar desparpajo, el libro contiene expresiones típicas de una mirada desprejuiciada y libre, que busca incansablemente ser puente, mensajero y nexo entre las diferentes generaciones, estratos sociales y nacionalidades, propulsando con desenfado la oportunidad de experimentar la capacidad de asombro que se refleja de manera natural en la mirada del otro.
Majo Castillo nació el 7 de junio de 1970 en Beccar, Provincia de Buenos Aires, y permaneció en la casa de sus padres hasta los 22 años.
Estudió un año de periodismo en la UCA y abandonó para irse a vivir al interior. Vivió en J. V. Gonzalez, provincia de Salta, luego un tiempo más en Tartagal, Jujuy y en el año 1997 se radicó en Neuquén capital. Dos años después, finalmente, compró una casa en una chacra en Cipolletti, Rio Negro que es en donde vive actualmente desde el año 1999.
Se dedicó a ser mamá a tiempo completo hasta que sus hijos terminaron la primaria. Luego, la necesidad le brindó la oportunidad de conocer varios oficios: recep-cionista de consultorios, moza de una pizzería, admisionista en un laboratorio de análisis clínicos, secretaria de gerencias, responsable de capacitaciones, algo así como una "chica multirrubro".
Desde hace 7 años trabaja como líder de Calidad en una empresa de servicios petroleros. Escribe desde pequeña; conserva sus diarios íntimos con largos elatos inconsistentes, cursis, repletos de color y vida y libres de juicio previo.
Siempre recuerda cuando la seño de lengua le decía: "saquen una hoja, vamos a hacer una descripción... era la mejor noticia que podía recibir. Hojas y hojas escribiendo, desde títulos como: "la vaca" o "el náufrago que perdió su bota en medio de la mar".
Este es su primer libro.
